Consumiendo calidad se obtiene la magia.

Hoy , tarde de lluvia y con trabajo en la computadora, o sea cola en silla. Un té rico era la companía ideal...pero oh sorpresa! no había té negro en hebras, el que acostumbramos, pero había té negro de saquitos (para emergencias, jejeje!)...y me dije:"me lo preparo igual, total le voy a agregar una vaina de cardamomo, azúcar negra...", pues no, cuando me acomodé y comencé a tomarlo mi paladar me lo recriminó. Claro, si quiero algo rico ,todo debe ser de excelencia. Y pensé entonces que con un buen chocolate,iba a suceder lo mismo. No es igual un pedazo de baño de repostería con un relleno exquisito o especial, que un chocolate como dios manda con un rico relleno...se disfruta mil ves más... Comenzando por el aromas de los ingredientes, siguiendo por su textura dentro de nuestra boca, y finalmente, pudiéndonos quedar con un recuerdo bastante extenso en nuestras papilas y mucosas, que también suman al momento del disfrute. Por eso: para el placer puntual, té de hebras vs.saquitos de té; chocolate vs. bañao de repostería sabor a chocolate...café tostados en granos vs.café torrado de filtro. Y asi con todo lo demás, seamos sinceros, no engañemos a nuestro sabio paladar, y si no lo es, pues no le privemos de un gran momento. Hasta la próxima!.